El dibujar es una de las primeras herramientas que desarrollaron nuestros antepasados, y probablemente sin ella, no se hubieran logrado tatos avances en la humanidad.
Desde las pinturas rupestres de hace más de 50,000 mil años, pasando por las representaciones anatómicas del renacimiento y terminando en el dibujo técnico de ingeniería; el dibujo nos ha servido tanto para construir casas y diseñar aviones, como para representar nuestra creatividad y compartir mensajes. De ahí radica su gran valor.
Aunque no seas un artista, el dibujar te puede servir para transformar ideas abstractas a concretas, desarrollar tu sentido espacial y ¿por qué no?, hacer bonitos regalos de navidad a tus conocidos. Por esa razón, todos deberíamos ponernos a dibujar.
En este artículo te traemos una lista de 12 consejos que te ayudarán a convertirte en un buen dibujante.
Las bases
Aprende a ver
En esencia, el dibujo es una actividad de percepción y comprensión de las cosas. Es decir, de entender lo que estás viendo.
Pese a que, en teoría todos vemos lo mismo, en realidad hay muchos detalles importantes que damos por hecho y terminamos ignorandolos . Por eso es importante entrenar nuestra capacidad de observación.
Un ejemplo clásico para mejorar nuestro ojo de dibujante, es copiar tu mano.
Entre más la dibujes, intenta plasmar detalles que pasan desapercibidos. Por ejemplo, los cartílagos, articulaciones o las marcas de los nudillos.
Conoce tus materiales
Los lápices no hacen al dibujante, pero el conocerlos bien y entender su uso, sí.
Comúnmente los lápices se clasifican por dureza: H, F, HB y B. Así como de forma numérica (del 2 al 9).
- Los lápices H son los que tienen grafito más duro, por lo tanto, los que tienen un tono más claro. Se usan mucho en dibujo técnico y para crear detalles claros. Por cierto, son los más difíciles de borrar.
- Los HB básicamente son los clásicos lápices del #2 de toda la vida.
- Los lápices F son una versión más dura y clara que los HB. Como característica, duran más tiempo afilados.
- Los B son los más oscuros y suaves. Se usan principalmente para el dibujo artístico
De acuerdo a la guía de Fussell, todo dibujante debería de tener los siguientes lápices: 2H, HB, 2B, 4B y 6B. Los más claros (los H) se deben utilizan para contornos y los más oscuros (los B) para soberados u otros detalles que lo requieran.
Otra opción técnica es dibujar con plumas y estilógrafos. Aunque si bien, es similar al dibujo a lápiz, hay algunas variaciones técnicas que hay que tener en cuenta, por ejemplo, el delineado y sombreado.
Líneas y formas
De acuerdo a la teoría, toda imagen se puede descomponer en figuras geométricas y líneas. Por lo cual, si quieres hacer dibujos complejos y bien hechos, es fundamental dominar el arte de las líneas y formas.
Un ejercicio para mejorar es dibujar líneas paralelas en una hoja de papel. Intenta que sean lo más rectas posibles y de la misma forma, trata de variar con los ángulos sin girar el papel. Esto te ayudará a controlar de mejor manera los movimientos de la muñeca.
En cuanto a las figuras, haz círculos, óvalos, rombos, etc. Trata de hacerlos de forma rápida sin marcar en el papel.
Sombreados
El sombreado y jugar con la luz, son parte importante de la técnica, incluso si aprendes bien las bases, es casi seguro que la calidad de tus dibujos aumente bastante.
Pero ¿Qué es la sombra? En palabras simples, es un área no tocada por la luz directa. En los dibujos nos sirve para crear una sensación de profundidad y volumen en los objetos; algo fundamental en los trabajos realistas.
Aunque la teoría de la descomposición de la luz es bastante compleja, el comportamiento de sombras se pude reducir en dos aspectos: la dirección y la intensidad de la luz.
Estas son algunas de las características más comunes que valen la pena aprender:
- Entre más intensa sea la luz, más oscura será la sombra.
- Entre menor sea el ángulo de impacto de la luz, más larga será la sombra.
- La tonalidad de la sombra normalmente es variable. Es decir, entre más se aleja del objeto, más se difuminará.
Busca la simetría
Nuestro cerebro está programado para considerar la simetría como algo correcto, por lo tanto, al aplicarlo en nuestros dibujos harán que se vean mejor (al menos en la teoría)
Sin embargo, no todo es simetría. Por ejemplo: en las composiciones muchas veces se busca más el equilibrio visual y la armonía de los elementos. De ahí nace los conceptos de “la proporción áurea”, la regla de los tercios, etc. Un tema que sin duda vale la pena tocarlo en otro post.
Aprende sobre perspectiva y espacio
Para que tus dibujos no se vean tan “planos” y simples, es fundamental aprender sobre la perspectiva.
La definición de dibujo en perspectiva es básicamente una proyección de un entorno 3D en una superficie 2D.
El tema de la perspectiva es bastante amplio como para verlo solo por encima, sin embargo, hay maneras muy intuitivas para crear esa sensación de profundidad. El clásico ejemplo que se enseña en las clases de arte es el del cubo:
- Dibuja una línea horizontal.
- Marca dos pintos sobre la línea. A estos se les llama comúnmente como “puntos de fuga”
- Dibuja una línea en cualquier parte por debajo del horizonte
- Conecta los puntos de fuga con la parte superior e inferior de la línea-
- Agrega dos líneas perpendiculares más y luego conecta los puntos de fuga.
- Listo, tienes un cubo hecho con perspectiva.
Recomendaciones
1 Comienza a dibujar más seguido
El aprender a dibujar es un proceso que requiere mejora continua, o como bien dicen: “la práctica hace al maestro”. Así que es fundamental que empieces desde ahora mismo a dibujar.
Un consejo relacionado es que lleves siempre contigo un cuaderno de bocetos, un bolígrafo o un lápiz. Esto te ayudará a practicar en cualquier lugar y no tendrás la excusa de “no tener tiempo”.
2 Estira las manos
Como se mencionó anteriormente, la clave para dibujar bien es saber controlar la mano. Por lo cual, es importante tenerla suelta cuando estás dibujando.
Lo que hacen muchos artistas antes de dibujar, es agitar la mano y estirar los dedos. Esto además de ayudarte a desentumecer los dejos, te puede servir para evitar calambres y dolores de muñeca.
3 Copia otros dibujos y fotografías
Cuando estás iniciando y quieres mejorar tu técnica, lo ideal es copiar dibujos de otros artistas o fotografías.
Normalmente para la mente es más sencillo copiar una figura de dos dimensiones, en especial cuando se desean reproducir los bordes. Así mismo, el copiar trabajos de otros te puede servir para aprender más sobre la técnica y comprender de mejor forma el concepto de composición.
4 Inscríbete a clases de dibujo
Si, puede que para muchos las clases presenciales no sean una opción (por cuestiones de dinero o tiempo), pero también es cierto que siguen siendo el método más efectivo para aprender a dibujar (o aprender cualquier otra habilidad).
A diferencia de los libros, videos en internet o tutores a distancia, tener un profesor presencial te puede ayudar a corregir tus errores y mejorar tu técnica. De igual manera, tomar clases en una escuela o academia te servirá para ser más disciplinado y responsable; algo fundamental para lograr tus objetivos.
5 Crea tu propio estilo
Ya cuando controles más o menos bien las bases y no te cueste mucho trabajo copiar objetos comunes, es momento de desarrollar tu propio estilo.
El estilo es básicamente una mezcla entre lo que sabes, lo que sientes y lo que creas. En otras palabras: es tu huella digital artística.
Si bien, el aspecto técnico sin duda es importante, lo que en verdad te dará un valor como artista será tu capacidad de crear imágenes y transmitir sensaciones.
Si deseas tomarte el dibujo como algo serio o solo como un simple hobbie, busca crear tu propio estilo.
Recuerda: El estilo hace que tu obra te represente.
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